Ellen Nació en Bélgica, en el seno de una familia que la educó con amor, conciencia y mucho respeto hacia la naturaleza. Desde niña siempre le facilitaron espacios de autoconocimiento y de desarrollo de su ser espiritual, sembrando en ella inquietud por el mundo y por seguir aprendiendo, por ese motivo desde jovencita sintió en su corazón la necesidad de conocer otros lugares.
Vivió en México durante un año, donde conectó por primera vez con la cultura y tradición de ese mágico continente y después continuó volando hasta Sud África, donde realizó las prácticas de la carrera de educación especial que en ese momento estudiaba. Al regresar a su tierra natal después de las intensas experiencias que Latinoamérica y África le regalaron, sintió que ese no era el lugar en el que quería enraizarse, y fue Mallorca la isla que escogió para trabajar, vivir y formar una familiar.
Ser madre de dos varones la conectó con una poderosa fuerza interna por querer defender los derechos y necesidades de los niños para que puedan vivir una crianza e infancia respetuosa. Eso la llevó a formarse en pedagogía holística de la Eco-Escuela Sa Llavor en Mallorca y participar en varios proyectos de escuelas libres y alternativas.
Además es una mujer muy apasionada por la nutrición consciente, energética y sana, amante del arte en todas sus formas: el canto, la música, el tambor, el baile…, siendo facilitadora de baile sagrado circular en diferentes círculos de mujeres. Su misión de vida es crear unión y alegría entre la gente facilitándoles la conexión con la Madre Tierra, por ese motivo es en estos momentos, la guardiana de un hermoso lugar en la naturaleza que acoge y llena de amor y magia los encuentros, talleres y círculos de Templo Femenino.